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El problema
Todos los días, miles de millones de pies cúbicos del gas natural del mundo se queman o se ventilan a la atmósfera. El gas natural no solo tiene un efecto perjudicial sobre el medio ambiente, sino que su sobreproducción representa un riesgo para la reputación de las empresas y el cumplimiento de las restricciones gubernamentales.
EFECTOS AMBIENTALES NOCIVOS:
Metano (CH4), el principal componente del gas natural, es 80 veces más peligroso que el dióxido de carbono (CO2) durante los primeros 20 años después de que llega a la atmósfera de la Tierra. Con el tiempo, el metano sigue siendo 25 veces más peligroso que el CO2, porque atrapa mucho más calor y libera más energía. La quema y ventilación de gas metano contribuye a un aumento de los gases de efecto invernadero, que los estudios han relacionado con el cambio climático y la interrupción de los ciclos climáticos.
MULTAS REGLAMENTARIAS:
Independientemente de los cambios en el clima político, es cuestión de tiempo antes de que las agencias gubernamentales federales y estatales regulen más estrictamente las emisiones de gases de efecto invernadero. El cumplimiento ambiental ya es impuesto por muchas regulaciones y multas de propietarios privados.
REPUTACIÓN CORPORATIVA MANCHADA:
Muchas empresas públicas y privadas se enfrentan a una enorme presión del público, así como de inversores y accionistas, para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Cada vez más, los operadores del sector energético están preocupados por su imagen corporativa debido a la creciente presión de los ciudadanos y grupos ambientales. Esto podría tener un gran impacto negativo en la atracción de inversiones adicionales, lo que obstaculizaría gravemente el potencial de crecimiento futuro. Para seguir siendo viable a largo plazo, la captura de gases de efecto invernadero es imprescindible para todos los productores de hidrocarburos.
BENEFICIOS PERDIDOS:
La práctica de ventilar y quemar metano es nada menos que desperdiciar una valiosa fuente de energía. La tecnología ha evolucionado, lo que hace que capturar y utilizar gas metano sea más económicamente viable. Muchas partes del mundo donde se desperdicia gas metano sufren una grave escasez de energía eléctrica. La tendencia actual de alejarse de la energía diésel, que se utiliza en la perforación y el fracking, hacia la energía eléctrica solo acentuará esta escasez de electricidad.
LA SOLUCIÓN BAUER
La quema y ventilación de metano se puede reducir significativamente al comprimir el metano para alimentar plantas de gas natural líquido (GNL) en miniatura para capturar hidrocarburos valiosos, alimentar plantas de energía en miniatura para generar electricidad local en el sitio o alimentar una tubería de ventas. Esto también puede resultar en ingresos adicionales significativos para el operador.
BAUER ofrece soluciones totales para la recuperación y el procesamiento de gas in situ:
- Unidades de recuperación de vapor para recuperación de gas flash
- Unidades de gran volumen para recuperación de gas de pozo
- Sistemas de compresores de refuerzo para inyección en tuberías de alta presión
- Generación de energía eléctrica in situ
